Por: Redacción
Playa del Carmen, Q. Roo.- Un video difundido en redes sociales ha generado fuerte indignación pública al mostrar una agresión física de una doctora del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) contra una madre que exigía atención médica para su hijo en el área de urgencias de la Unidad Médica Familiar de esta ciudad.
De acuerdo con los testimonios y las imágenes captadas por los propios familiares, el incidente ocurrió cuando la mujer visiblemente desesperada reclamaba que su hijo llevaba más de tres horas con fuertes dolores sin recibir atención médica, mientras el personal del turno se encontraba descansando dentro de un consultorio.
En el video se escucha a la madre gritar: “¡Mi hijo lleva tres horas llorando de dolor y nadie lo atiende!”, mientras el padre del menor comienza a grabar la escena como evidencia. En ese momento, una doctora sale del consultorio, intercambia palabras con la familia y, tras sentirse increpada, se abalanza violentamente contra el hombre que graba, intentando arrebatarle el teléfono.
El forcejeo provoca que la profesional de la salud caiga al piso y, al reincorporarse, vuelve a intentar golpear a los familiares, lo que obliga a otros trabajadores a intervenir para detenerla.
El video que se ha vuelto viral en plataformas como Facebook y X (antes Twitter)— muestra a los guardias de seguridad del IMSS intentando controlar la situación, mientras algunos testigos aseguran que “la agresión fue iniciada por la doctora”.
Hasta el momento, ni el IMSS ni las autoridades locales han emitido una postura oficial sobre el incidente, aunque el material ha acumulado miles de reproducciones y comentarios que repudian enérgicamente el comportamiento de la profesional y exigen una investigación inmediata y sanciones ejemplares.
Este hecho ocurre en medio de denuncias constantes por saturación y falta de personal en las clínicas del IMSS, particularmente en zonas de alta demanda como Playa del Carmen, donde los pacientes suelen esperar horas para recibir atención.
Diversas voces en redes sociales y organizaciones civiles han reiterado la urgencia de revisar los protocolos de atención médica, así como garantizar condiciones laborales adecuadas que eviten este tipo de episodios que deterioran aún más la relación entre médicos y derechohabientes.
Familiares del menor confirmaron posteriormente que el niño fue atendido horas después del altercado, aunque no se ha informado su diagnóstico ni el estado actual de su salud.
La sociedad, por su parte, repudia categóricamente cualquier forma de violencia, recordando que la vocación médica exige empatía, profesionalismo y respeto hacia los pacientes, especialmente en situaciones de urgencia y vulnerabilidad.
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